E. DANIEL TRUFFAT
El autor -en la versión escrita de una previa conferencia- desarrolla algunos principios más filosóficos que jurídicos sobre la Inteligencia Artificial, junto con una breve noticia sobre esta. E informa sobre las áreas en que los sistemas digitales están impactando en el área concursal en Argentina.
En el marco de actividades digitales que ha encarado el Instituto Iberoamericano de Derecho Concursal, en este duro año de pandemia y enclaustramiento, se fijó para el día 25/11/2020 un webinar que, entre otros tópicos, incluyó sendas conferencias sobre “Inteligencia Artificial y Derecho Concursal” a cargo del profesor español Vicente García Gil y el suscripto. El título del encuentro, que tuvo lugar por Zoom bajo la prolija y gentil coordinación de la destacada jurista italiana, la profesora Stefanía Pacchi, fue “La coyuntura actual del derecho de crisis atravesado por la pandemia”. También disertaron sobre “Pactos de deuda sostenibles” los profesores David Sotomonte (de Colombia) y Daniel Martínez Vigil (de Uruguay).
Este texto que confío a mi querida y siempre lista Errepar es tanto como una “versión escrita” de tal exposición. Eso significa que no es una transcripción, que hay aquí algunas diferencias expositivas. Sin embargo, y al igual que en la conferencia, corresponde expresar mi agradecimiento al Ingeniero Nicolás Casariego -un querido amigo de la juventud que vive en España y es la víctima propiciatoria para obtener material las veces que he tenido que trabajar cuestiones referidas a la Informática-. Cabe aclarar, además, que la concepción última sobre la relación entre el mundo de la Inteligencia Artificial (IA) y cuestiones morales, éticas, evolutivas -al final del día, referidas a la relación entre los hombres (sapiens) y las inteligencias artificiales, está fuertemente influida por la lectura de los tres libros de Yuval Noah Harari, y en especial para el desarrollo que aquí se formula, del último: “21 lecciones para el siglo XXI”. Es posible que se advierta fácilmente que no se trata de un seguimiento al pie de la letra porque yo tengo temores y reservas sobre la vinculación hombre-máquina que no parecen ser tan inquietantes para Harari.
Este contenido, que forma parte de la Publicación Doctrina Societaria y Concursal ERREPAR (DSCE), es exclusivo para suscriptores de Errepar, podés ingresar al artículo completo haciendo clic acá.
Si aún no sos suscriptor, accedé ahora mismo a todas las prestaciones y servicios haciendo clic acá.